lunes, 29 de febrero de 2016

CUANDO ME VAYA

Cuando me llame la Parca,
no quiero losa de mármol,
no quiero pena ni llanto,
no quiero ramos de flores,
no quiero que tengáis temores,
Cuando me toque
(porque todo llega
pues dicen que aquí
tan sólo estamos de paso),
no quiero que penéis mi ausencia
porque estaré
con Antonio y Prudencia.
Así  que es ahora,
cuando quiero los abrazos;
después de muerta,
de nada sirve decir:
“Qué buena era”
todos los somos cuando morimos
(o al menos eso decimos)
aunque fueran más malos que la quina,
de los muertos , no se habla mal
aunque suene a hipocresía.
Así, que los hechos y las palabras,
en vida terrenal
puesto que no sabemos
que existe, más allá.

Algo habrá sin duda
aunque no sepamos ¿qué?
las religiones dicen
que es cuestión de fe.
Otros creen, en la reencarnación
yo la verdad, no lo sé.
El que marcha no vuelve
¿dónde estará el misterio?
eso tan sólo lo saben,
los que están, en el cementerio.
Mis cenizas que las echen
si puede ser, en Los Cortaos ,
en mi Melilla
 así estaré cerca de ellos.

Mi único deseo es,
haber dejado un buen recuerdo
de mi paso por esta vida
ni más, ni menos,
esa sería mi dicha.
Aunque espero seguir aquí muchos años
hoy me ha dado por pensar
en fenómenos extraños;
será esa melancolía
que a veces nos invade
y hoy es uno de esos días
que añoro,
la ausencia de mis padres.

María A. Catalá
Enero 2016



TRES COSAS


Tres cosas dicen 
hay que cumplir en la vida.
Árboles planté varios.
Hijos, he tenido dos.
Me queda escribir un libro
pero con tanto verso
creo que cumplí en exceso
lo que el mandato ordenó.

Viví una buena infancia.
gocé, de mi juventud,
tengo mi media naranja
y en llegando a los 60
soy, una abuela con salud.

Tuve maestros
de los que aprendí mucho.
Tengo recuerdos imborrables
de vecinos y amistades,
unos hermanos que me quieren,
 una familia entrañable
y soy de Melilla
¿qué más puedo desear?
Nada me falta en lo personal.

Me conformaría
con no tener que lamentar
el sufrimiento inmerecido
de criaturas que luchan
por sobrevivir,
ya sea por hambre,
por enfermedades o,
porque perdieron aquello
que les permitía vivir.
¡Qué dramas tengo que ver y escuchar
y yo, quejándome de la hernia discal.
¡qué injusta es la vida
unos muchos y otros “na”

Las tres cosas ya cumplí
algunos , ninguna de ellas
pero… si tenéis salud, dinero y amor
como dice la canción
vais bien servidos
en este mundo cada vez
más egoísta y perdido.

María A. Catalá

20-x-2014


60 YA

60 YA¡

Jolín 60 ya,
pero si di a luz hace “na”.
Bueno tanto como 28 años ya.
¡qué barbaridad!

Mi hijo mayor ha cumplido los 40
y casi sin darme cuenta
señal, que no me ha ido tan mal.

60, si,
tampoco noto tanto la diferencia
aparte de colesterol subido,
la hernia discal,
y ya no cuento más jaja .
Virgencita que me quede como estoy
aunque me sobre cintura
y las patas de gallo vayan a más.

¡Jolines 60 ya!
no me quejo,
estoy contenta con mi edad
como no soy famosa,
decirla, me da igual.
¡Ostras 60 ya!
pero…. y contarlo
¿no vale “na”?
pobre los que no pueden decirla
por presentarse la Parca,
sin avisar.
De modo, que tendré
que acostumbrarme a decirlo
cuando me pregunten la edad
Cincuenta y…..
¡Ah no, 60 ya!

María A. Catalá
22-08-2015







MALDITO SEAS

Maldito seas

Perdí  a mi suegro,
perdí a mi madre,
perdí dos primas
y dos amigas;
¡maldito cangrejo que
envenenas con tus pinzas
los cuerpos de las personas
contaminándolas
con tus malicias.

Unos cuantos afectados tengo
entre amistades y familiares,
más por ahora te ganan;
la metralla con que se defienden
es más fuerte que tus males
y poco a poco te van venciendo
maldito cáncer.

Pisamos cada día más firme,
el armamento es más eficaz
y atacamos directamente
el núcleo de tu maldad.

El sufrimiento es penoso
no lo vamos a negar
pero, en las batallas ganadas,
ya tenemos
 menos victimas ,que contar.

Nos encontramos al acecho
pendiente de tus ataques
la prevención es un hecho
aunque te escondas, cobarde.

Mi recuerdo más entrañable
para dos personas
que  se han ido en este año
dos mujeres luchadoras,
dos ángeles,
que te plantaron cara
y lucharon como jabatas
para ganar la partida
 más no pudo ser,
no le dejaste terminar sus vidas.

Por ellas
y por todos y todas
los que sufren tus males
yo  te digo:
¡Ya basta maldito cáncer¡

María A. Catalá
12-10-2015



EL CAMBIO DE CHIC

El Cambio de chic

He hablado con personas
que han cambiado  su manera de pensar,
su manera de vivir,
tras pasar un accidente
o una grave enfermedad.

Y es que son muchas las veces
que no valoramos lo que tenemos
hasta que no desaparece.

Se piensa, a largo plazo:
aún queda tiempo
para realizar esto o aquello
pero el destino,
es un cruel dictador
y no admite negociación;
entonces, la lucha por arañarle
tiempo a la vida se hace necesaria
ya no importa nada.
Ni los bienes, ni la juventud,
ni el dinero,
tan sólo tener salud.

Cuando se le gana la partida a la Parca
se suele decir, que  se cambia el chic.
se comenta, que no vale la pena
arriesgar tanto, para conseguir un fin.
Se procura disfrutar de las pequeñas cosas,
del valor de la familia,
de la amistad…
Es un pena que para comprender esto
se tengan que pasar, malos momentos.

Yo he decidido no esperar
por si me acecha cualquier sorpresa…
si existe un problema, buscarle la solución
y… sino tiene remedio
de nada servirá el sofocón.

Lo dicho: a vivir que son dos días
las penas, aparecen solas
mientras tanto, que no falte la alegría.

María A. Catalá

17-02-2015