martes, 11 de octubre de 2016

MADURITAS


Maduritas

Maduritas nos denominan
 por pasar de los 50
una manera muy fina
de decir, que ya vamos para viejas.
Maduras, si señor
menos duras, más pellejas
pero sabias en experiencia.
Patas de gallo que asoman
por una cara ya experta
al igual que otras señales
que por el cuerpo despiertan.
¿Las canas?
Se tintan de rubia o morena.
¿Los michelines?
Se disimulan con ropa nueva.
Una rayita en el ojo,
un poquito de carmín y
 maquillaje si se tercia.
¡Y a salir, a disfrutar,
que ya se acabó la regla
esa pesadez del mes,
los dolores de cabeza….
Maduritas¿ y qué?
como la fruta jugosa
dulce, sabrosa,
maduras y orgullosas
por ser madres y abuelas.
Qué tengo 61?
pobre de mi sino los tuviera
porque estaría bajo tierra..
Me conformo con mi edad
¡y más arrugas que vengan
aunque no sean bellas.

Doy gracias por tener salud
y poder decir:
¡qué voy "pa" vieja¡.
Doy gracias por celebrar
cada año de mi vida
y disfrutar, de mis nietos
 y de mi nieta.
Eso si me gustaría
tener la cabeza cuerda
que no quiero dar la lata
ni ser cargo para nadie
cuando se acabe,
sola no voy a estar
porque estaré con mis padres
Mientras, aquí espero
 ilusionada el camino a los 70
¿Maduritas?
¡Qué bien me suena.


María A. Catalá
11-10-2016


sábado, 7 de mayo de 2016

YO SOY ASÍ

YO, SOY  ASÍ

¿Por qué seré tan sensible?
¿Por qué me preocuparán los problemas de la gente
si sería más feliz, sintiéndome indiferente?

Cada cual se las apañe.
Cada cual, con sus problemas
y yo, a vivir la vida
como dijo aquél actor
¡A la mierda!
Claro está que me reclaman
si precisan mi presencia
más cuando opino, de cosas que no interesan…
entonces, voy de mandona,
de prepotente.
yo diría que de lela.
no, si ya me doy cuenta.

Pues nada a partir de ahora,
voy a echar la cremallera
cuando hable, lo haré
con quien a mi me parezca
porque no voy a cambiar
ni a pensar de otra manera
le brindaré mi amistad
a quien bien se lo merezca.

Y… sin temor a equivocarme, 
detecto a mi alrededor
amigas que me valoran
con mis virtudes y mis defectos
a esas, las tendré siempre a mi vera.
Las que lloran cuando lloro,
las que me llaman cuando estoy enferma
Las que ríen cuando rio
Las que escuchan mis poemas,
las que me corrigen
y me dicen lo que piensan.
A esas son las que quiero
y a las que lloro su ausencia,
a las que echo de menos
y echaré mi vida entera.
con las que riño,
con las que bailo,
con las que comparto mesa.
A esas, las veo todas guapas
ni flacas, ni gordas, ni feas.
Todas guapas, de alma y de corazón
esas son las que quiero yo
con la otra,  indiferencia.

Rectificaré mil veces
si es que fuera necesario.
no soy, ni pretendo ser perfecta
sólo exijo, sinceridad
la hipocresía, no es muy buena consejera
Cuando hablo, no pretendo que compartan mis ideas
tan solo, que las comprendan.
¿cabezota e insistente?
puede que sea
pero no insulto a la gente
ni provoco mal a nadie
solamente soy sincera
y si tengo que callarme porque mis palabras hieran…sé hacerlo.
Digo, lo que me autorizan
que no soy de chismorreo.

 Un palo más o un palo menos
según se mire.
Decepcionada sería la palabra
de esta que escribe.
No guardo, ni odio, ni rencor
y mucho menos venganza,
sé, que lo hice de corazón
aunque me duela en al alma.

Pido humildemente perdón
si mi proceder por ignorancia
fuera incorrecto.
Rectifico, si fuera así
 no me importa decir :LO SIENTO

María A. Catalá

19-04-2012

PASO DE LOS MALOS ROLLOS

Paso de los malos rollos

He llegado a esa edad,
donde veo la vida de otra manera,
donde me da igual,
que haga viento o que llueva,
donde paso de los malos rollos,
donde me evado, de líos y embrollos,
donde le doy importancia
a aquello que lo merece,
donde me enfado muchas menos veces,
donde valoro más lo que tengo,
donde soy más comprensiva
ante gente que padece,
donde creo ser más tolerante y paciente,
donde me tomo la vida con más calma,
donde huyo de las prisas
y disfruto con las charlas
me estresan los gritos y
las discusiones que no conducen
a nada.
Ahora me comunico, a través
de las nuevas tecnologías
en ella he descubierto
a gente que no conocía
y que quizá, no conozca en la vida
pero a los que considero
amigos y amigas,
dándome mucha alegría
cuando al abrir el Facebook
me saludan, me contestan
o le dan a”me gusta”
al leer mis versos.
Desde este medio, os quiero decir:
Gracias por visitarme
gracias por compartir.
  
Supongo que con los años
cambiamos el chic dándonos cuenta
que lo importante es vivir,
imagino, serán nuevas
que a ciertas edades, se manifiestan
o quizá sean el fruto de la experiencia
pero yo estoy más pasota
como se dice vulgarmente
eso si, no paso de la buena gente

María A. Catalá
18-02-2015



EL CHOCOLATE


EL CHOCOLATE

¡Ay el chocolate!
Lo compro negro y sin azúcar
¿quién se resiste a catarlo,
sabiendo donde lo tengo guardado?
Y es que me digo:
¿qué mal hace una onza a diario
dicen , que es muy bueno para el cerebro
porque tiene entre otros , Selenio
y a mí la memoria me está fallando
así que tendré que ponerle remedio.

Los kilos que me sobran
son causa de la menopausia
( y me he quedado tan pancha)
ja  ja pero es verdad,
no como grasas
por tener el colesterol un poco alto
así que, aunque al flotador,
no le falta más que la cabeza del pato…
supongo que los kilos se irán
cuando los sofocos se me hayan pasado.
Mientras , sigo con el chocolate
“pa” conservar la memoria
si no se me olvida
lo que quería contaros.

¡Vaya rollo que he soltado
para justificar tan delicioso manjar.
También dice la Ciencia
que va muy bien para levantar la moral
y, como servidora es muy obediente
a partir de ahora, me comeré
un poquito más

Y colorín , colorado
este rollo se ha acabado
me voy, que me espera
un suculento bocado.


María A. Catalá

sábado, 19 de marzo de 2016

MIS RECUERDOS



Este poema lo escribí al poco de morir mi padre 
y en él expreso mis sentimientos hacia la tierra 
que me vió nacer.
La guitarra que se escucha de fondo es mi padre tocando
El Emigrante y Una Granaina



https://www.facebook.com/1378164843/videos/10209061452958325/




lunes, 29 de febrero de 2016

CUANDO ME VAYA

Cuando me llame la Parca,
no quiero losa de mármol,
no quiero pena ni llanto,
no quiero ramos de flores,
no quiero que tengáis temores,
Cuando me toque
(porque todo llega
pues dicen que aquí
tan sólo estamos de paso),
no quiero que penéis mi ausencia
porque estaré
con Antonio y Prudencia.
Así  que es ahora,
cuando quiero los abrazos;
después de muerta,
de nada sirve decir:
“Qué buena era”
todos los somos cuando morimos
(o al menos eso decimos)
aunque fueran más malos que la quina,
de los muertos , no se habla mal
aunque suene a hipocresía.
Así, que los hechos y las palabras,
en vida terrenal
puesto que no sabemos
que existe, más allá.

Algo habrá sin duda
aunque no sepamos ¿qué?
las religiones dicen
que es cuestión de fe.
Otros creen, en la reencarnación
yo la verdad, no lo sé.
El que marcha no vuelve
¿dónde estará el misterio?
eso tan sólo lo saben,
los que están, en el cementerio.
Mis cenizas que las echen
si puede ser, en Los Cortaos ,
en mi Melilla
 así estaré cerca de ellos.

Mi único deseo es,
haber dejado un buen recuerdo
de mi paso por esta vida
ni más, ni menos,
esa sería mi dicha.
Aunque espero seguir aquí muchos años
hoy me ha dado por pensar
en fenómenos extraños;
será esa melancolía
que a veces nos invade
y hoy es uno de esos días
que añoro,
la ausencia de mis padres.

María A. Catalá
Enero 2016



TRES COSAS


Tres cosas dicen 
hay que cumplir en la vida.
Árboles planté varios.
Hijos, he tenido dos.
Me queda escribir un libro
pero con tanto verso
creo que cumplí en exceso
lo que el mandato ordenó.

Viví una buena infancia.
gocé, de mi juventud,
tengo mi media naranja
y en llegando a los 60
soy, una abuela con salud.

Tuve maestros
de los que aprendí mucho.
Tengo recuerdos imborrables
de vecinos y amistades,
unos hermanos que me quieren,
 una familia entrañable
y soy de Melilla
¿qué más puedo desear?
Nada me falta en lo personal.

Me conformaría
con no tener que lamentar
el sufrimiento inmerecido
de criaturas que luchan
por sobrevivir,
ya sea por hambre,
por enfermedades o,
porque perdieron aquello
que les permitía vivir.
¡Qué dramas tengo que ver y escuchar
y yo, quejándome de la hernia discal.
¡qué injusta es la vida
unos muchos y otros “na”

Las tres cosas ya cumplí
algunos , ninguna de ellas
pero… si tenéis salud, dinero y amor
como dice la canción
vais bien servidos
en este mundo cada vez
más egoísta y perdido.

María A. Catalá

20-x-2014


60 YA

60 YA¡

Jolín 60 ya,
pero si di a luz hace “na”.
Bueno tanto como 28 años ya.
¡qué barbaridad!

Mi hijo mayor ha cumplido los 40
y casi sin darme cuenta
señal, que no me ha ido tan mal.

60, si,
tampoco noto tanto la diferencia
aparte de colesterol subido,
la hernia discal,
y ya no cuento más jaja .
Virgencita que me quede como estoy
aunque me sobre cintura
y las patas de gallo vayan a más.

¡Jolines 60 ya!
no me quejo,
estoy contenta con mi edad
como no soy famosa,
decirla, me da igual.
¡Ostras 60 ya!
pero…. y contarlo
¿no vale “na”?
pobre los que no pueden decirla
por presentarse la Parca,
sin avisar.
De modo, que tendré
que acostumbrarme a decirlo
cuando me pregunten la edad
Cincuenta y…..
¡Ah no, 60 ya!

María A. Catalá
22-08-2015







MALDITO SEAS

Maldito seas

Perdí  a mi suegro,
perdí a mi madre,
perdí dos primas
y dos amigas;
¡maldito cangrejo que
envenenas con tus pinzas
los cuerpos de las personas
contaminándolas
con tus malicias.

Unos cuantos afectados tengo
entre amistades y familiares,
más por ahora te ganan;
la metralla con que se defienden
es más fuerte que tus males
y poco a poco te van venciendo
maldito cáncer.

Pisamos cada día más firme,
el armamento es más eficaz
y atacamos directamente
el núcleo de tu maldad.

El sufrimiento es penoso
no lo vamos a negar
pero, en las batallas ganadas,
ya tenemos
 menos victimas ,que contar.

Nos encontramos al acecho
pendiente de tus ataques
la prevención es un hecho
aunque te escondas, cobarde.

Mi recuerdo más entrañable
para dos personas
que  se han ido en este año
dos mujeres luchadoras,
dos ángeles,
que te plantaron cara
y lucharon como jabatas
para ganar la partida
 más no pudo ser,
no le dejaste terminar sus vidas.

Por ellas
y por todos y todas
los que sufren tus males
yo  te digo:
¡Ya basta maldito cáncer¡

María A. Catalá
12-10-2015



EL CAMBIO DE CHIC

El Cambio de chic

He hablado con personas
que han cambiado  su manera de pensar,
su manera de vivir,
tras pasar un accidente
o una grave enfermedad.

Y es que son muchas las veces
que no valoramos lo que tenemos
hasta que no desaparece.

Se piensa, a largo plazo:
aún queda tiempo
para realizar esto o aquello
pero el destino,
es un cruel dictador
y no admite negociación;
entonces, la lucha por arañarle
tiempo a la vida se hace necesaria
ya no importa nada.
Ni los bienes, ni la juventud,
ni el dinero,
tan sólo tener salud.

Cuando se le gana la partida a la Parca
se suele decir, que  se cambia el chic.
se comenta, que no vale la pena
arriesgar tanto, para conseguir un fin.
Se procura disfrutar de las pequeñas cosas,
del valor de la familia,
de la amistad…
Es un pena que para comprender esto
se tengan que pasar, malos momentos.

Yo he decidido no esperar
por si me acecha cualquier sorpresa…
si existe un problema, buscarle la solución
y… sino tiene remedio
de nada servirá el sofocón.

Lo dicho: a vivir que son dos días
las penas, aparecen solas
mientras tanto, que no falte la alegría.

María A. Catalá

17-02-2015