Tuteamos, con singular
ligereza
a personas, que bien
por su condición
o simplemente por canas
merecían ser tratadas
con mayor educación.
No podemos dirigirnos
hacia la gente mayor
con tan escaso respeto.
Debemos pedir permiso
al tratar de tutearles
y ser ellos quien
decidan
cómo debemos tratarles.
Ellos son nuestros
mayores
( suponiendo, que
lleguemos…)
nos gustara que nos
traten
con el máximo respeto
así que yo pido por
favor
lo mismo, a nuestra
gente mayor.
María A. Catalá
20-11-2005
No hay comentarios:
Publicar un comentario