¡Cuántas veces en la
noche oscura
recuerdo y me lamento!
¡Cuánto ir, cuánto
vagar
por todo aquello que
siento.
Errores que he cometido
me recuerda mi
conciencia.
¡Tantos errores humanos
que pudieron evitarse,
a veces, sin
importancia,
sin pecado, sin
malicia,
pero que son
importantes
cuando lo analizas.
María A. Catalá
01-11-2005
No hay comentarios:
Publicar un comentario